ANA ROSA QUINTANA

 “La unión de familia y deporte fue lo que más me atrajo de Sotogrande”

Es sin duda una de las caras más conocidas del periodismo de nuestro país, líder de audiencia en su franja y referente informativo en el ámbito político, social y de entretenimiento. 18 años liderando las audiencias de las mañanas de la televisión y, a partir de septiembre, estará también por las tardes, probablemente liderándolas también.

Hablamos con Ana Rosa Quintana sobre cómo afrontará este nuevo reto y sobre su “segunda casa” Sotogrande, un rincón donde puede huir de los flashes y recargar pilas.

En plena vorágine de la actualidad política y ya sumergida en la preparación del proyecto de la nueva temporada para Telecinco, Ana Rosa nos atiende con su energía y, a la vez, serenidad, muy animada y transmitiéndonos la ilusión de quien empieza algo nuevo.

Ya nos ha anticipado que este verano necesitará más que nunca recargar pilas. Como clienta habitual del KE Restaurante, la veremos relajada disfrutando de Sotogrande como una más, sin generar revuelo. Ana Rosa es un claro ejemplo de cómo sacarle partido a todo lo que ofrece esta urbanización.

¿Qué te hizo decidirte por Sotogrande en tus diferentes etapas vitales durante estos años?

Vengo a Soto desde hace casi 30 años. Cuando mi hijo mayor tenía 10 o 11 años buscaba un sitio para que un niño, hijo único, tuviera el referente de pandilla y de veraneo que hemos tenido todos. Estuve buscando por la costa, y cuando descubrí Sotogrande supe que era lo ideal, porque unir veraneo y deporte para los pequeños es muy sano. Y fue así como comencé a venir y ya se ha convertido en mi segunda casa.

Los niños cogen su bici y se pueden ir a la playa, al tenis. Hay campos de golf públicos y privados, club de playa, los chicos salen… quizás la carencia es lugares para los jóvenes, pero se organizan de otra manera. No te preocupas de ellos. Es esa unión de deporte y familia lo que más me atrajo.

¿Es la privacidad una de las ventajas de Sotogrande?

Lo fue desde el principio. Sotogrande es un sitio muy cómodo, nos terminamos conociendo todos. Puedes vivir tranquila, nadie se mete en tu vida, es muy relajado hasta en la forma de vestir. Para salir por la noche no te tienes que vestir como si fueras a los Oscar, te vistes cómoda y cómo quieres, eso también es Sotogrande. No hay presión de la prensa, que son estupendos, pero como no es un sitio de famoseo eres uno más.

Por otro lado, la vida social está muy bien entendida, puedes ir a fiestas o cenas, pero si no vas nadie se molesta. Es una forma de veranear muy libre. Hay muchos mundos en Sotogrande, cada uno tiene sus círculos en los que se mueve tranquilamente.

De hecho, te solemos ver en el KE como una más, siempre relajada…

El KE es nuestra segunda casa, y un punto de encuentro, todo el equipo es maravilloso y, sobre todo, se come fenomenal.

Por eso me veis relajada. Somos muy amigos de Nono y de Silvia, desde hace muchos años, que son de mi pandilla de siempre, gente que viven aquí casi todo el año, son profesionales o que tienen sus negocios.

En esta edición estamos celebrando el 60 aniversario de Sotogrande, ¿cómo definirías Sotogrande si tuvieras que dar una noticia?

No hay una urbanización en toda Europa como Sotogrande, primero porque se proyectó pensando en el futuro, con un diseño urbanístico único: amplitud de calles y mucha vegetación. Un proyecto muy cuidado, es muy extenso, sin grandes alturas, no está súper poblada ni siquiera en agosto. Es un lugar precioso, además de tranquilo. Donde puedes disfrutar todo el año.

En vacaciones hay una gran oferta de actividades deportivas como navegar, golf, pádel y, por supuesto, disfrutar de las tardes del polo que es una actividad preciosa para ir, por el ambiente, los caballos, es muy divertido. Y es, sin duda, uno de los atractivos de Sotogrande.

¿Cómo ves su evolución?

Es fantástico que Sotogrande se haya abierto hacia las marinas y llegue a más gente. Creo que se ha adaptado muy bien. Sotogrande ha progresado con más integración de todo tipo.

Tienes todos los servicios, la gente tiene una imagen de Sotogrande distorsionada, es lo opuesto a Marbella. Es más veraneo como los de antes. Al inicio era muy elitista, con parcelas muy grandes. Pero, incluso, en esos inicios muy exclusivos las familias eran muy discretas. Y eso es algo que se mantiene, el que se quiere exhibir no se va a Sotogrande.

¿Te planteas en un futuro vivir aquí? ¿Crees que reúne las condiciones para ser tu lugar de residencia o crees que le falta algo para ello?

Me plantearía pasar más temporadas cuando no tenga un trabajo tan exigente. Y es que, en el fondo, lo que pasa es que soy muy urbana, muy de Madrid. Quizás el único “pero” serían las comunicaciones; hay que ir por ave a Málaga y Algeciras, no es muy cómoda la comunicación.

Aunque vengo a menudo en otoño e invierno, que es delicioso y me aporta mucha paz. Es un equilibrio perfecto para una escapada del ruido con una temperatura estupenda.

En España parece que no se conoce tan bien Sotogrande ¿crees que se transmite bien la idea de lo que es esta urbanización entre quienes no lo conocen?

La verdad es casi mejor, yo a todo el mundo le digo es muy aburrido, no vengáis (nos dice entre risas).

¿Qué escapada recomendarías por el entorno de los pueblos del campo de Gibraltar?

Sotogrande tiene un entorno espectacular. Tienes todos los pueblos de la sierra, desde Castellar a Ronda. Si quieres diversión está Marbella a media hora y todo el talento de La Línea y Algeciras.  Al otro lado, Tarifa, el Palmar y Bolonia.  Hay muchos sitios en un radio muy cercano, muy diverso, Y con el que movernos según esté el levante o el poniente

¿Cómo es un día perfecto en Sotogrande?

Mi día perfecto, depende. A principios de verano, cuando empiezo las vacaciones, lo que más me apetece es encerrarme en mi casa, ver el mar, pasear por la playa y disfrutar de mi cueva. El mar me da mucha serenidad. De todas formas, una vez he bajado el nivel de estrés esos primeros días, hacemos mucha vida familiar y con amigos que vienen a visitarnos. A medio día comemos en casa, con productos de la zona como el pescado, que es buenísimo, no falta el gazpacho o ensaladas. Y por supuesto no me falta el equipo completo para preparar paellas. Y por las noches sí salimos a cenar con los amigos que vienen a visitarnos.

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